El cuerpo humano está hecho de la manera más perfecta, es como una fábrica que diariamente funciona sin la menor falla, siempre y cuando tenga el trato y mantenimiento adecuado.
Sin embargo, a la vez también puede ser difícil de entender, sus reacciones a los estímulos exteriores y los interiores que luego se desatan.
Susan Babbel, especialista en Psicología, principalmente en la enfermedad de depresión, de la Universidad de Santa Clara, en EEUU, propuso una teoría acerca de lo que ocurre en el cuerpo y las señales que envía.
Atender esta teoría podría representar una diferencia entre la salud y la enfermedad, ya que los problemas psicológicos también se muestran en el cuerpo. La incomodidad y el dolor podrían ser manifestaciones de problemas internos como secretos ocultos, asuntos sin resolver.
De acuerdo a la especialista, los padecimientos crónicos son síntomas de estrés y problemas emocionales, en especial cuando el cuerpo está bien y no tiene motivos para sufrir dolores.
Aquí te presentamos ilustraciones que muestran la teoría de Babbel, junto con unas recomendaciones para una vida mejor:
1. Dolor de cabeza
La sobrecarga de actividades o trabajo es una de las principales causas de los dolores de cabeza, así como la prisa de una vida ajetreada y preocupaciones constantes.
Tal vez sea tiempo de hacer una pausa y dar tiempo para ti, relajarte y evitar las preocupaciones. Hazlo sin remordimientos, así aumentarás tu serenidad y rendimiento, sobre todo ya no habrá dolores de cabeza.
2. Cuello
La carga de rencores hacia otras personas o la inconformidad con imperfecciones propias podrían estar causando el dolor del cuello. Su molestia surge ante la incompetencia de perdonar a alguien o a nosotros mismos.
Una mejor actitud y compasión hacia ti y los demás podría mejorar tu condición física. Recuerda que no estás obligado a cumplir las expectativas de los demás. Pero también puedes animarte a perdonar y disfrutar más de la vida con las cosas que te gustan.
3. Parte superior de la espalda
Falta de apoyo emocional y ausencia de amigos cercanos podrían ser las causantes de los dolores en esta parte del cuerpo.
La interacción con diferentes personas ayuda a sobrellevar los pensamientos de que nadie te quiere. El amor a ti mismo, acompañado de conocer gente nueva ayudará bastante a superar estos malestares.
4. Hombros
Una gran presión y saturación de carga emocional podrían ser las causas de los dolores de hombros. La toma de decisiones en ocasiones causa un estrés innecesario.
La confianza y amistad que puedas tener con alguien podrías aprovecharla y compartir tus problemas. Al hacerlo tendrás alivio y te liberarás de cargas emocionales para solucionar los problemas que se presenten.
5. Espalda baja
La espalda baja también puede sufrir los embates de la crisis económica si es que te preocupas en forma constante por el dinero. Una vida adinerada tal vez sea el sueño de muchos.
Si bien el dinero es importante para un buen estilo de vida, la felicidad se complementa con otros aspectos. Deja las preocupaciones, valora lo que tienes y disfruta las cosas verdaderamente importantes, esas son gratuitas. Dedicarte a tu pasión te dará satisfacciones y también ganancias económicas.
6. Codos
Ser obstinado puede provocar los dolores de codos; esa falta de flexibilidad y rechazo a compromisos que puedan estarse presentando en tu vida. Tal vez temas aceptar algo y mejor opones resistencia.
La vida es un proceso de cambios constantes, aceptarlos te hará la existencia más sencilla. No es necesario complicarse tanto las decisiones, sólo gastas energías inútilmente, es mejor aceptar las cosas que no se pueden cambiar.
7. Manos
Esa necesidad de amigos también se manifiesta en las manos y sus dolores. La falta de convivencia con otras personas es señal de que debe abandonar el mundo limitado en que te encuentras y explorar allá afuera. Las amistades pueden ser una medicina.
Hacer nuevos amigos será lo mejor para quitarte esos dolores. Intenta frecuentar a viejas amistades, compañeros de escuela, hasta acudir a eventos con mucha gente, donde puedas abrir conversaciones y conocer a otras personas.
8. Cadera
No hay que tener miedo a los cambios que trae consigo la vida, eso evitará los dolores en la cadera; aferrarse al confort y evitar sorpresas no ayuda a tu salud. Mejor piensa en cómo asumir esos giros y no caer en la resistencia de algo nuevo.
La vida cambia, entre contrastes pero también sorpresas interesantes. Deja que fluya el curso natural de las cosas. Los cambios son buenos y pueden generar nuevas aventuras y aprendizaje. No hay que dejar las cosas para después.
9. Rodillas
Si tienes un ego bastante crecido tienes que comenzar a cambiar, de lo contrario tus rodillas seguirán sufriendo. Pensar sólo en nosotros mismos y olvidarnos de los demás provoca el dolor en esta parte del cuerpo. No es sano pensar que el mundo gira a nuestro alrededor.
Mira a tu alrededor: no eres la única persona en el planeta. Sé más atento con los demás. Escucha a tu amigo, ayúdale a tu mamá, apoya a tu compañero de trabajo. Ayuda a la gente más a menudo. Puedes hacer alguna obra de caridad.
10. Pantorrilla
Los celos no son buenos para ninguna parte del cuerpo, en especial para las pantorrillas. La sobrecarga emocional y los tormentos amorosos te harán sufrir hasta el cansancio.
La confianza en la pareja es fundamental; no hay que intentar controlarla ni crearse cosas en la mente. Considera renunciar a las relaciones insanas que hayas tenido en el pasado o actuales que no son positivas.
11. Tobillos
A veces el trabajo nos absorbe de tal manera que nos olvidamos de nosotros y disfrutar el placer de la vida. Esto provoca el dolor en los tobillos. Hay que tomar más en cuenta lo que nos causa felicidad.
Consiéntete. Cómprate algo que te haga sentir bien, lo que sientas que mereces, pero sin caer en el exceso. Pero además haz algo que te reconforte, como dormir o comer un postre costoso. Planear un viaje o tener una relación romántica podrían ayudar bastante.
12. Pies
Una apatía profunda podría estar causándote los dolores en los pies, como si no quisieras seguir adelante. Esto sucede más cuando de pronto piensas que todo va mal y estás al borde del fracaso.
Los pequeños detalles son los que dan sabor a la vida. Las personas, el sabor de la comida, el sol, el viento, la lluvia son más apreciados con esta visión. Adoptar una mascota o tener un hobby que te agrade le daría más sentido a tu vida, claro sin recordar momentos tristes.
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